El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Arica condenó hoy –lunes 24 de marzo– a M.A.R.I. a la pena única de 12 años de presidio, junto con las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para el desempeño de cargo u oficio público y derechos políticos, además de la inhabilitación absoluta para profesiones titulares durante el tiempo de la condena. La sentencia fue impuesta por los delitos consumados de abuso sexual impropio y violación impropia, perpetrados en 2013 en la ciudad.
En un fallo unánime, el tribunal –integrado por los magistrados Eduardo Rodríguez Muñoz (presidente), Óscar Huenchual Pizarro (redactor) y Gabriel Ormeño Valdebenito– determinó, además, la inhabilitación absoluta perpetua del condenado para desempeñar cargos, empleos, oficios o profesiones en ámbitos educacionales o que impliquen una relación directa y habitual con menores de edad.
Restricciones adicionales
El fallo establece que M.A.R.I. quedará bajo interdicción del derecho de ejercer la guarda y de ser escuchado como pariente en los casos que la ley lo determine. Asimismo, estará sujeto a la vigilancia de la autoridad durante los 10 años siguientes al cumplimiento de la pena principal, debiendo informar a Carabineros cada tres meses su domicilio actual. El incumplimiento de esta obligación podría configurar un delito según lo dispuesto en el artículo 496 N°1 del Código Penal.
El tribunal también dispuso que, una vez que la sentencia quede ejecutoriada, se proceda a la toma de muestras biológicas del condenado para determinar su huella genética e incorporarla en el registro nacional de ADN de condenados.
Antecedentes del caso
Según lo acreditado en el juicio, en 2013 el imputado, quien en esa época convivía con la madre de la víctima de 6 años, cometió actos de significancia y relevancia sexual en contra de la menor y la violó. La resolución del tribunal establece que estos hechos fueron probados más allá de toda duda razonable, lo que llevó a la condena dictada este lunes.